Hendidura cósmica

14 junio 2010

Órbitas vitales.

“Así es esto de las canicas. Algunas te rozan y otras te cambian el rumbo.”

Cuando escuché esta frase estaba a miles de kilómetros de mi casa, en un muelle solitario,  con mi mejor amiga. Una noche estupenda, sentados en una banquita de madera, compartiendo  recuerdos, cosas, cicatrices. En ésa banquita recibí una operación a corazón abierto para cerrar una vieja dolencia. En medio de la brisa marina, con los pies desnudos en la arena y la luz del amanecer, cambió mi rumbo.

Estos dos últimos años he conocido mucha gente. Incluso ciber-amigos. Aunque suene estúpido (creo que no sólo suena) me gusta mucho una chica que ciber-conozco.

A veces imagino al internet como un gran agujero negro, capaz de torcer las órbitas vitales de los que nos acercamos. Ejemplo de esto es como conocí a July  que tal vez en la vida fuera de internet jamás la hubiera conocido. Es una persona fascinante, que me contó historias interesantísimas. O Armando que es el más férreo crítico de mis textos y un gran conversador. Me ha invitado a leer poesía para cuando abra su cafetería, en un país de Sudamérica y jamás nos hemos visto. Espero de verdad poder cumplir ése compromiso.

Todos los que he conocido de alguna manera han cambiado esta curva vital y mis amigos definitivamente me han cambiado el rumbo.

Estoy a punto de emprender un cambio importante en mi vida profesional. Ya lo he intentado sin éxito, pero ésta vez será diferente. Claro, con mi canica favorita.

posted by Jorge Luis at 1:51 a.m. 1 comments